Para todos los hombres del mundo que quieran habitar el suelo argentino....

No es bueno estar sin hablar con la gente. Los abogados sabemos eso. Es muy frecuente que de una charla informal con el que cuida los coches, te lleves un juicio por un accidente y que de la charla con el guardia de seguridad del edificio, te lleves el juicio de divorcio. Es así de lineal.-

Si hay algo que somos los abogados, es multifacéticos. No hay trámite que se nos resista. Entre los pendientes para mi próxima vida, está el aprender a decir que no. 

Es por eso que terminé en Migraciones, dándole una mano a un matrimonio que tiene que hacer la radicaciòn de sus hijos nacidos en el exterior.- Qué problema hay? me quedaba en zona....-

Llegué unos minutos más temprano y me quedé en la puerta esperándolos. 

Ay Dios! qué trabajo insalubre el del  tipo que está sentado en la puerta del edificio e intenta, como puede, direccionar a cada uno que llega hacia el trámite que le corresponde.-

En quince minutos que estuve ahí, llené mi umbral hasta el año que viene.-

Llegan tres bolivianos, peruanos, del altiplano, no sabría identificarlos, porque aún cuando hablan español en teoría, no se les entiende nada.-

Se paran en la puerta e intentan entrar.-

-"Buen día señores, indíquenme por favor el trámite que vienen a hacer"- 

Se miran. Uno habla y dice: -"venimos a migraciones"-

-"Sí. Acá es"- mientras les señala el cartel que mide más o menos una cuadra de largo. -"Qué trámite tienen que hacer?"- 

-"Ehh, venimos a dejar los papeles"- 

Yo, observando atónita.

-"Sí señor. Dígame, tiene la constancia donde se le entregó el turno para venir hoy?"-

Se miran. Uno le pregunta a otro: "tenemos?". El otro le dice: "sí"- -"Sí"- le contesta.

-"Me la daría por favor?"-

Abren una mochila, abren otra, abren un bolso, sacan una carpeta, sacan otra.... finalmente sacan la hoja con el turno.-

-"Muy bien. Tienen que dirigirse al edificio 6. Por favor, fírmeme acá"- y le señala un recuadro de unos 10 cm. por 10 cm. que esta demarcado en el extremo inferior derecho de la hoja, mientras le da una birome.-

El boliviano, peruano o lo que fuere, firma en el margen superior derecho de la hoja, encima de la fecha que consigna el turno.-

Lo miro, el de informes me mira, miro al bolita, miro la hoja. 

-"Me está jodiendo?"-

-"No. Es todo el día así. La gente no puede entender consignas simples".-

Pasan dos minutos. Llega un señor.

-"Buen día señor, qué tramite viene a hacer?"-

-"No sé. Yo acabo de bajarme del Buquebus y soy Argentino"-

Qué c...hace en migraciones, pensé para mí?

-"Bien. Tiene un turno para Migraciones?"-

-"No. Vengo para que me sellen el documento, por las dudas"-

Lo vuelvo a mirar. -"Este también me está jodiendo"-

-"No señor. Usted se bajó del buquebus, pasó por el control migratorio y ya se puede ir a su casa"-

-"ah, muchas gracias"- Y se fue.-

Llega un chino.

-"Buen día señor, qué trámite viene a hacer?"-

El chino le contesta en chino.-

-"No le entiendo señor. Vino con alguien que pueda traducirle o Do you speak english?"-

El chino le contesta en chino.-

El de informes, que de verdad era perseverante, con cuidado, le tomó la carpeta que el chino tenía en la mano, tomó el turno, y le pidiò a otro empleado de migraciones que lo acompañara hasta el edificio en donde le tocaba su trámite.-

No pude más que decirle que le admiraba la paciencia, la cortesía y buen tono con que le hablaba a la gente, porque yo a esa altura ya hubiera repartido dos o tres patadas en el traste. Y sòlo llevaba diez minutos.-

-"Gracias. Tardé un tiempo en tener paciencia, pero todo se aprende. Hace meses que igual estoy intentando que me cambien de puesto"-

Por suerte, mi espera terminó ahí y llegaron las personas a las que yo esperaba.-

Dos minutos más, y me tiraba al río desde la Fragata Libertad que está amarrada a 500 metros.-

Algo para la memoria.

En la sucesión de los despelotes de todos los días, perdés el hilo de algunas cosas. Es normal, me digo. Soy una persona. Tengo olvidos, problemas de memoria, muchos juicios y algunos ni interesa qué pasó sino por cuánto se arreglan.-

Normalmente, llegás a un arreglo con el abogado y a partir de ahí, ves cómo te organizás para firmar y pagar. El destinatario del dinero, en estos casos, el que se accidentó, entra en escena cuando ya el abogado tiene todo listo.-

Claro, si no hay contratiempos.-

El de A es uno de esos. Teníamos todo prolijo y acomodado. La semana siguiente teníamos la audiencia para coordinar pago. Tenía que ir A. Llegamos. Llega el abogado con cara larga. De A.ni rastro.-

-" Tengo un temita. El cliente.está preso. Como lo podemos solucionar?".

No hay muchos modos, pensé para mí. No se puede trasladar el juzgado a la cárcel, así que tendrás que ver como la cárcel trae al preso acá. Lo dejo a tu criterio. Avisame.

Quizás el criterio le es esquivo o el sistema no le colabora, porque no volvimos a saber del abogado.-

Un tiempo más tarde, empezamos a batallar con un médico forense que reclamaba que el que tenía que revisarse no iba. Y es acá en donde la memoria te juega la mala pasada.-

Una empleada del Estudio llama al abogado para ver por qué su cliente no se revisaba.

Viene la empleada y me dice: -"En el caso de J., no se va a revisar porque está preso."- 

-"Uy, por Dios. Ponete las pilas. El expediente del preso tiene que cobrar, no se tiene que revisar. Te pido por favor que coordines que este pibe se vaya a revisar. Y que se revise el correcto, no el preso."-

No había manera. Ella insistía en que acá había un preso.

Otra vez volví a olvidar al preso, al juicio, al expediente.-

Hoy me levanté pasando revista. Veo la carpeta de A., y veo que tiene un turno para revisarse. Empecé a los gritos. Como va a tener un turno para revisarse si está preso????.

-" Nooooo, A. saliò hace dos semanas. Ahora tenemos preso a J." - me aclaró la secretaria.-

Así no se puede, muchachos. Salgan menos de caño porque mi memoria tiene capacidad finita.-

Ni una menos.

El dicho popular que dice que vos, recién cuando te separás, conocés a la persona con la que estuviste casada una década, es tan cierto como que amanece todos los días.

Aun cuando tardó más de lo que hubiera debido, la protección frente a la violencia de género ganó su lugar en la justicia. 

Mi amiga F, un alma pacífica, madraza, bien intencionada, amorosa y brindada, tuvo el tropiezo de conocer a G. Pero el amor es ciego y los instintos mandan. De ese amor y ese instinto, saliò algo bueno. V de casi dos años.

Como nada sube hasta el cielo y todo tiene un final, este llegó más pronto que tarde.

No queda muy claro si el problema de G es que la relación se terminó o si que de ese final, se deriva, como mínimo, una cuota alimentaria decente.-

 Lo cierto es que G no lo hizo fácil desde entonces. Llamados, agresiones, burlas, indiferencia y como el menú tenía que ser completo, también violencia. Como el es negado únicamente para repartir plata, la violencia la esparció a los vínculos extendidos. No hubo familiar de F que se haya salvado.

Superados el desencanto y paralisis inicial, F movió el andamiaje y, nobleza obliga, el conurbano bonaerense resultó tierra muy fértil.

Alcanzó algo más de una mañana para que la justicia de un lugar del conurbano de la Pcia.de Bs.As. le diera un perímetro de protección de quinientos metros, por un tiempo de casi seis meses y la prohibición de contacto por parte de G por cualquier medio, incluyendo palomas mensajeras, con ella, con su familia extendida y, por el momento, con su niño.-

Ella tiene el cuerpo y la mente cansados, y por momentos parece rendida. Pero su valentía y potencia impresionan hasta al más inconmovible.

Hoy más que nunca, mi amiga querida, NI UNA MENOS!

Académicamente hablando.

Haber ido a la trilingue, me dio una versatilidad idiomática de la que me enorgullezco y de la que aún no se recuperó la cuenta bancaria de mis padres.-

Cuando empezamos a cursar la maestría, el grupete era algo más amplio. Teníamos compañeros muy atildados y formales, que obviamente se desprendieron con el tiempo. Estaba claro que no pegaban con nosotros, o nosotros no pegabamos con ellos, según como se lo mire.-

M, un divino total, algo más joven que los mosqueteros, estudioso y trabajador, era uno de los seriecitos. Al comienzo, estaba más o menos, más menos que más, entre nosotros. 

No tenemos muy en claro cuándo fue que empezó el desprendimiento, pero creemos que este episodio que les voy a relatar fue el comienzo de su alejamiento.

Yo no estaba muy convencida de desempolvarlo, porque este es un blog jurídico (sic),  pero los mosqueteros le dieron duro y seguidito hasta tarde anoche en whatsapp para torcerme la voluntad.

Tengo flojo el recuerdo de las circunstancias que rodearon la situaciòn, pero todo venía a cuento de la experiencia que cada uno había tenido el día que el director de la maestría, le había tomado la entrevista de admisión.

De por sí, todos coincidíamos en que habíamos tenido nervios, en que se sabía que no entrabas solo por pagar la cuota, que tu curriculum tenía que estar a la altura de la Universidad y que bla bla bla para desembocar finalmente en que también tenías que caerle en gracia al director, Dr.C.-

M no había tenido ningún contratiempo. Trajeado, pelo engominado, egresado de universidad privada y con diploma de honor, su entrevista había sido un trámite.

Los tres mosqueteros se habían defendido sin mayores dificultades y les dieron su boarding pass.

Hasta que me tocó a mi. Poniéndole un tinte romántico a todo, soy una convencida de que estábamos predestinados a conocernos.

Les conté que apenas llegué a la entrevista, el Dr.C sin mirarme siquiera y dando un vistazo por encima a mi certificado analítico, me espetó: "Qué materias raras que elegiste en tu especializaciòn. Si en lugar de estar en una entrevista para estudiar, estuvieras en una entrevista para que yo te diera trabajo, ya te hubiera echado."-

Good Start dirían los americanos.

Yo no tenía nada que perder, así que no tenía por què callarme: "Le agradezco el cumplido Dr.C., pero da la casualidad que estoy en una entrevista para ingresar a la maestría y no estoy pidiéndole trabajo. Tengo uno, me va bien y encima soy la hija del jefe. Imagínese que lo último que haría sería pedirle laburo a Usted. Por lo demás, llueve en Buenos Aires como la última vez, vine casi en canoa, los zapatos que tengo ya no sirven más y se me inundó hasta la cachufla. Usted dirá si ingreso o no a la maestría que dirige"-

M quedó petrificado. Su cara de estupor fue de las más elocuentes que ví en mi vida.-

Ese día empezó su alejamiento y nosotros cuatro empezamos a consolidar esta adorada "asociaciòn casi ilícita" que en marzo de este año sopló diez velitas.-

La primera impresión no es la que cuenta.

El macho alfa del grupete tiene todo el "physique du role" del abogado high class. Pero claro, todos mordimos el barro alguna vez.

No es lo que más le gusta, pero el que esté libre, que tire la primera piedra. 

Cuenta la leyenda que una vez tenía que moverse hasta Aldo Bonzi. Para los parámetros que él maneja, era algo así como ir hasta Africa.-

Puso la cabeza a funcionar para ver cómo hacía para zafar. Atrevido y lanzado, llama por teléfono al Tribunal y avisa que se rompió una pierna. Uno puede mirarlo con lupa y está más que claro que nunca se rompió nada.

Pienso y re pienso. En su cerebro, qué construcciòn hacía?. Que a la audiencia la iban a borrar del almanaque??? Es algo así como prolongar la agonía. Tarde o temprano, iba a tener que palear la hambruna africana.

Pasado un tiempo prudencial, el Tribunal, que entre nosotros, debe conocerse a los especímenes como JLB como la palma de su mano, le asestó la nueva fecha.

El animal a esta altura les dijo más o menos que estaba paralítico, que no podía ir y mucho menos, subir un piso por la escalera.

-"No se preocupe, Doctor, nosotros por Usted y su cliente, mudamos el juzgado a la planta baja así que vengan tranquilos. Los esperamos a la hora fijada. No falten" , le tiraron a modo de advertencia

Como dice el dicho "antes muerto que sencillo", ahí viajaron JLB y su cliente. Eso sí, fue en muletas.

Que pase el que sigue.

La vida abogadoril tiene algo de azar. Los resultados que uno alcanza no siempre son mérito o catástrofe propia. Hay miles de factores, planetas y personas que confluyen en una misma situaciòn.- 

Mentiría si dijera que no tengo nostalgia por algunos clientes que perdí. Porque uno los aprende a querer. Todo viene de romance pero un buen día, te cae una sentencia para atràs y pasaste de ser su salvadora y fuente de consulta a ser la peor abogaducha que pudo habérsele parado en frente.-

En la locura de todos los días, uno ama su profesiòn. Pero qué abogado podría confesar que nunca, nunca ni en sueños, dictaminó: "después de esto, largo la profesiòn y me pongo un bar".-

Yo soy una.

Una de las hermanas macana, MF,  y yo vivíamos en el mismo edificio. La juventud nos tenía llenas de  una energía que hoy no tenemos o por lo menos, direccionamos para otros puntos cardinales. Las reuniones de consorcio eran batallas campales, de modo que teníamos el mote de: "esas dos abogaditas quilomberas". 

Yo creo que en el fondo, todas lo seguimos siendo para ya más calmadas. Es entonces cuando empezás a mirar para atrás con nostalgia.-

La primera vez que pensé en abandonar la profesiòn, dicho bien en voz alta, llorando y ante un Fiscal, fue cuando desalojaron a una pobre viejita de la casa en la que había vivido, criado a sus hijos y llorado su viudez. Se ve que no lo conmoví  demasiado porque a la mujer la puso de patitas en la calle y a mí me aconsejó hacerme tratar por un psicólogo para encontrar mi vocaciòn.-

La siguiente vez, ya fue unos años más tarde. SP era un cliente de esos con los que te llevás bien. Teníamos dos o tres juicios que estaban más o menos bajo control hasta que se descontrolaron. Remontar uno de esos juicios fue como dejar la vida. No sólo batallaba con él. También batallaba esporádicamente con el padre. Noches despierta, pilas de papeles, ríos de tinta, embargo de casa en un country,  auto, cuentas de banco vacías y  creo que un par de años más tarde y varias puteadas encima, todo se tradujo en recuperar algo de plata. También juré abandonar la profesiòn.-

Después de este episodio, me tomé un impasse en mi crisis profesional. Había que pagar la casa, viajar, hacer el famoso master y vivir. No me podía dar el lujo de replanteos.-

Los años traen arrugas y sabiduría. 

Sigo penando si pierdo algún cliente, llevo en mi memoria los buenos recuerdos de los que siguieron su camino pero me volví mucho más práctica y aprendo de los errores. Que pase el que sigue y a facturar. 

Al buen gusto, buena cara.

Nobleza obliga, este blog es este blog gracias a las incontables historias que, aunque no me pertenecen, llegan a mí como diciéndome: "tomá, acá estoy. Escribime para que no me lleve el viento". 

El cuarto mosquetero JLB no es como nosotras. Saliò del mismo Master pero cultiva relaciones mucho más sofisticadas que nosotras. Nada de chusmetear en la peluquería o con el grupo de madres del colegio.-

Lo del tipo son los estratos superiores.-

Como siempre, una cosa lleva a la otra. Veníamos whatsappeando todos al mismo tiempo y sin entender nada de lo que hablamos, porque el guiso de temas está siempre bien revuelto.-

S estaba puteando porque hacía una hora que estaba atascada en el tráfico.

-"Nena, hay partido de football. Yo me atasqué hace cuatro horas. Me imagino ahora"-

-"No te puedo creer! a qué hora juegan estos chotos?"-

-"Che, en qué zona al final señaron casa?"-

-"Estoy que vuelo, un compañerito le pegó en la cabeza a F. Los pibitos vienen todos animales. La madre del pequeño demonio dijo que el nene es "muy físico". Qué hago???"-

Entre medio del diálogo académico, JLB cuenta que un cliente de su Estudio, tenía un tema en una delegaciòn de defensa del consumidor en  alguno de los cinturones del conurbano bonaerense.-

Ya empezábamos mal. JLB en el conurbano bonaerense???? Nada exquisito podía salir de ahí.-

Parece que el cliente está flojito de papeles y viene sin cumplir la obligaciòn que la Defensora del Consumidor le había asestado.-

No muy amiga de los canales legales y formales, la Defensora llama a JLB y le dice:

-"Papi, acá las cosas son de frente manteca. O cumplís la decisiòn o a otra cosa"-

Horror!!! "De frente manteca"????  -"Y..... es militante."- aclaró el destinatario. 

Pasadas 48 hs., y cuando su buen gusto ya había dejado atrás el lapsus de la funcionaria, se despierta hoy con la solicitud de amistad que ella le cursaba.-

Las chichis, nos retiramos del diálogo. Ni queremos saber si la aceptó o no.-