jueves, 29 de mayo de 2014

Las hermanas macana. Parte 6. Y van...


Ellas son las top five de mis historias. 
Cuando ando relajada, zas, aparece una. 
El divorcio de MC es de esos que no terminan nunca. Pero no parece real, porque està terminado hace como dos años. Es que ella es tan màgica, que lo hace eterno. 
Despuès de toda la novela para inscribir el divorcio, darle a su sobrina el sobre que nunca apareciò, conseguirle todo de nuevo para comprar la camioneta, ahora le llegò el turno a su inquietud viajera. Se quiere hacer italiana!
Llegò un dìa en que mi telèfono empezò a arder. Era MC.  
-"Necesito urgente mi partida de matrimonio y la sentencia de divorcio, porque la gestora me pide eso para hacerme la ciudadanìa"-
-"Linda, todo eso lo tenès en el sobre que dio màs vueltas que una calesita y que finalmente pasò a buscar tu hijo menor hace como 9 meses. Abrilo, agarrà lo que hay adentro y dàselo a tu gestora"-
Pasan una horas y me manda un mail, reenviando a su vez el mail de la gestora en donde le pide que le diga a su abogada (a la sazòn, yo) que le pida a la Càmara Civil que legalice la sentencia y que la legalizaciòn diga que es para presentar en el Consulado. 
Y parece que yo era mandraque y no lo sabìa. 
En un mail cortito le contestè que ello no era posible, que ella podìa agarrar su sentencia en original (la ùnica que hay) y dàrsela a la gestora y que la mujer hiciera su trabajo. Pues de otro modo no habrìa ninguna divorciada que hubiera alcanzado la tan ansiada ciudadanìa comunitaria.
Silence por un dìa.
Hoy reaparece al telèfono (ella es tan tecnològica que siempre cambia el dispositivo) pidiendome su partida de matrimonio y su sentencia de divorcio.
Y ahora què hago????? 
Como me dijo una vez un tipo al que yo no le estaba entendiendo lo que me querìa decir: "Escuchame nena, yo en qué hablo? inglè hablo?".-





miércoles, 28 de mayo de 2014

Ni tan tan ni muy muy.-



Como me dijo una vez la sabia madre de las hermanas macana, en cualquier tiempo y lugar, siempre "los hijos son de la madre".- 
Las màs de las veces, uno ve a la madre dedicada y al padre ausente, potenciado a la enèsima vez cuando la pareja se separa.
Con los años y la edad, cada vez le escapo màs a los quilombos de familia. La ecuaciòn nunca es virtuosa. Mucho tiempo, gente rayada y lo peor, poca plata.
No sè por què, agarrè el de JG.
A vuelo de pàjaro, la historia es una pareja separada con una niña de cinco años. Muchas denuncias mutuas, que de verdad no sè si son verdad o mentira, pero tampoco clarificarìa saberlo.
La discusiòn es simple: los alimentos y las visitas. Despuès de muchas idas y vueltas, acordaron una platita para la nena y unas visitas para el padre. Los meses pasaron y los dos se dieron cuenta de que querìan màs de todo. Ella màs plata, él más visitas.
Ahì aparecì yo. El padre me cuenta que ella es una tal por cual, que le retacea el contacto con la nena, que bla, bla, bla. Cuando viene a mi oficina y me cuenta la historia, lo que peor me pone no es que la nena esto o la nena aquello, sino que a la criaturita le pusieron dos  nombres y  padre la nombra cada vez USANDO LOS DOS NOMBRES! cual telenovela venezolana.
Como el prototipo de una abogada vaga, empecé una carrera frenètica para llegar a un acuerdo y evitar un juicio eterno que va a dejarme pelada de la mala sangre que voy a hacerme. 
Tratando de obviar todas los calificativos personales que se hacen el uno sobre el otro, yo tenìa enfrente a un pobre padre, que sòlo veìa a su hija un fin de semana al mes, un dìa a la semana y dos dìas en todo el verano. Acepto en su defensa, que es bastante poco. Pero tambièn soy de la idea que en estas situaciones hay que acumular pequeñas conquistas para llegar a ganar la guerra. No sirve de nada pasar de cuatro dìas en el verano a querer tener enero y febrero a la nena con èl porque està clavado que la madre se va a poner como una gata acorralada, va a erizarse el pelo y a mostrar los dientes. Hay que ser màs inteligentes. 
Charla va, charla viene, la abogada de la mujer nos propone fin de semana por medio, una noche en la semana y dos semanas en el verano. Para arrancar, yo estaba màs que exhultante. Quizàs en unos meses, si los ànimos se calman, podès revisar y ver si le agregàs por ejemplo, una noche más en la semana.
Lo llamo a JG y le cuento mi primera gran conquista.
-"Eso es inaceptable. Yo no lo voy a tolerar. Mi hija DJ (y dale con los dos nombres...) necesita este espacio que se creò en mi entorno, independientemente de si yo estoy o no en èl (???????), necesita verme, necesita jugar con los hijos de C (su nueva novia)..."-
-"Mirà JG, todo eso es opinable. El juez va a mirar que tienen una nena de cinco años, que con este esquema, tiene un adecuado contacto con el padre. En unos meses, lo revisamos y vemos què le agregamos y/o modificamos, pero es seguro que esto es màs de lo que tenès en la actualidad"-
-"Y, no. No me convencès. Ademàs, necesito que ella se comprometa a consultar conmigo todas las decisiones de la vida diaria de DJ (en doble nombre!!). Si la nena tiene fiebre, ella me tiene que preguntar si yo estoy de acuerdo con el tratamiento mèdico que el pediatra diga, si la nena come carne dos veces por semana, yo tengo que saberlo para ver què se come en la mìa, si la nena tiene dolor de panza, yo tengo que saberlo. Y asì con todo."-
-"Escuchame JG, por què no me dejàs de joder?. No me garpaste los honorarios, tengo los ovarios llenos de hablar cien veces con la abogada de tu ex, de enterarme que hace dos semanas que a la nena la tenès vos porque te estàs compensando no sè què dìas que la nena no sè què c.... tuvo. Somos grandes!. Chau"-
Y arreglate nomàs, eso sì, con doble nombre.

lunes, 26 de mayo de 2014

La fauna diaria.


En el derrotero de la abogacía uno tiene la gran ventaja de conocer gente de todo tipo y estilo. Sin caer en esta moda de la discriminaciòn, es cierto que los abogados se pueden dividir en distintas categorìas. Estàn los que hacen laboral, los que hacen familia, los penalistas. Pero a mì la categorìa que màs me gusta es la de los "delirantes".-
No fallan. Tienen un juicio cualunque y se plantan como si fueran a ganar la loterìa.-
Hace un tiempo que venimos batallando con un juicio por un accidente de trabajo. Todo el accidente consistiò en cortarse el dorso de la mano con un vidrio, mientras limpiaba una habitaciòn de un telo.
La abogada iniciò el juicio, escribiendo la demanda cual tarzàn, y pidiendo una indemnizaciòn como si la pobre mujer hubiera quedado paralìtica.-
En todos estos meses, tratamos mucho de llegar a un acuerdo. No hay con què darle. Y eso que tengo tres ceros para darle. Pero no.
Hoy volvì a hablar. La abogada està enojadìsima.
Va, viene, hablamos, volvemos a hablar y todo se reduce a un corte en el dorso de la mano con un vidrio.
-"Ahhh, ahì està tu confusiòn"- me dijo.
-"Parà, jodeme que me equivoquè y la tuya no es la de la mujer que se cortò la mano con un vidrio en un telo????"-
-"Sì, sì. Es esa"-
-"Y entonces?. No estoy confundida."-
-"Sì, porque vos al juicio lo tenès como que es una mujer que se cortò la mano con un vidrio"-
Ya a esta altura estaba yo para cortarme con una galletita de agua.
-"Pero y què c... es????"-
-"Es que de ese corte, le derivaron problemas de columna."-
-"Eh????"-
-"Claro. Imaginate. Se cortò la mano derecha. Entonces para limpiar las estanterìas de las habitaciones del telo, tiene que usar la izquierda. Y para agarrar el secador y pasar el trapo, tiene que usar la izquierda. Y bueno, tanto uso de la izquierda, le torciò la columna."-
Y lo dijo sin ponerse colorada.