viernes, 13 de abril de 2018

No hay que tentar a la suerte.




Cualquier mañana de cualquier dìa, puede pasar a ser LA mañana de ESE dìa. La que te marca por un tiempo largo. 
La organizaciòn bàsica de una sociedad supone autoridades. A veces son probas, otras no. A veces son justas, otras no. A veces tienen paciencia, y a veces tienen pocas pulgas.-
Ir a un tribunal de faltas municipal es como pegarte una vuelta por el zoológico. Hay de todo y hasta una sala de audiencia pùblica para sentarse a escuchar. Siempre recomiendo a quien no tiene plata para ir al teatro, que se corra una mañana cualquiera a uno de èstos y  que no se olvide el pochoclo. 
Ese día iba yo por un problema de unas vacunas en un centro mèdico y estimaba resolverlo en un tiempo corto. 
Lleguè, pedì el expediente en la mesa de entradas, pasè mi credencial y me sentè a esperar el turno de mi audiencia con la juez de faltas.
A los cinco minutos, escucho mi nombre.
Como en las películas, me acerco al estrado, me presento, saludo a la Juez y mientras ella abre el expediente para ver què sainete le tocaba, entra su secretaria.
-"Disculpeme Doctora, volviò a venir el Señor C y dice que fue a averiguar lo que Usted le mandò pero el arquitecto le dijo que no le podìa dar eso porque no tenìa la escritura.-"
-"Yo no lo mandè a hablar con el arquitecto. Mandalo a la Municipalidad a averiguar si esa construcciòn, si tuviera el hombre la escritura, serìa habilitada o autorizada por el Municipio."
Retoma mi expediente, lo sigue leyendo y a la segunda pàgina, vuelve a entrar la secretaria.
-"Disculpeme Jefa. Dice el señor C que tambièn fue a la Municipalidad y que ahì le dijeron que no le podìan contestar y que le tenìa que preguntar al arquitecto."
-"Explicale que vaya y pregunte exacto lo que te acabo de decir. Que pregunte si esa construcciòn en seco que està haciendo sobre la calle XXX, la permiten y autorizan en el caso que el señor tuviera escritura. Porque este Partido no autoriza las prefabricadas"
Mmmmmm, què olor a humo que tiene esto. Este barrio tiene una villa gigante a veinte cuadras del Tribunal, y estoy casi segura que los materiales en abundancia son es el cartòn, la tierra y la chapa.  
Se va la empleada y la Juez se concentra en el problema que tenìa frente a ella. Me hizo unas preguntas, charlamos, intercambiamos alguna idea y casi estàbamos al filo de encontrar el rumbo cuando oootra vez entra la Secre.
-"Dice que eso que Usted lo mandò a hacer no se puede. Quiere que llame yo a la Municipalidad y lo pregunte?"-
-"No. De ninguna manera."-
-"Si le parece bien, le puedo escribir todo en un papelito y que lo entregue al empleado de la Muni para ver si puede hacer la averiguaciòn-"
-"No. Yo ya tengo tres hijos y no necesito uno màs. Dame un minuto que termino acà y lo resuelvo. 
Me mira. No necesitò explicarme que se tomaba un parèntesis e iba a resolver el asunto del señor C y su romance fallido con el intendente.-
Tuerce la cabeza, mira a la escribiente que tenìa al lado y comienza a dictar:
"En xxxx, a los xx dìas del mes de marzo de 2018, en el expediente nùmero ......, acta de infracciòn numero......, resuelvo: Mandar demoler la casa en contrucciòn  sobre la calle xxx e imponer al Señor C, JM una multa de $....... ".-
Y chau. Lo dejò a la intemperie y sin un mango. 
A mì, me mandò a la Municipalidad. 
Le dije: "quèdese tranquila que recien vuelvo cuando averigue. Si tardo un tiempo, no se asuste. Estoy averiguando".
Me dio la mano y metiò el expediente en el cajòn. A veces, no hace falta tener muchas luces. Solo alcanza con no tentar a la suerte.





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